Galletas sin lactosa en grandes superficies.

 Galletas sin lactosa fáciles de conseguir en cualquier centro comercial.

Las galletas eran uno de los alimentos de los que no sospechaba nada cuando me empezaba a doler la tripa. Antes solía atiborrarme de galletas sobre todo cuando no había nada más que eso y un vaso de leche para desayunar. Si nos fijamos cuidadosamente en los ingredientes veremos que la mayoría contienen leche o trazas de leche y dependiendo de nuestra intolerancia, podemos tener síntomas variados. En mi caso tomo 3 galletas María cada mañana y no he tenido problemas. En la etiqueta figura que contienen trazas de leche, así que en bajas cantidades no tienen por qué sentarnos mal. Probablemente lo harán si abusamos de ellas, tal y como yo hacía hace años. Si te comes 10 galletas de estas durante varios días seguidos, es casi seguro que ellas mismas serán capaces de obligarte a visitar inesperadamente el WC.

Para los que no se fían de las galletas convencionales, existe una cada vez mayor gama de galletas sin lactosa. Tengo que decir que como las María de toda la vida no me sientan mal en bajas cantidades, no me he molestado ni en probarlas, aunque lo haré próximamente ya que es algo que puede ser interesante sobre todo si tienen un sabor agradable.

Vamos a hacer un breve repaso por las galletas sin lactosa disponibles en las grandes superficies y que, por tanto son más fáciles de conseguir:

Gullón dispone de una variada gama de galletas sin gluten, leche, lactosa, o trazas. Están todas indicadas para niños de corta edad y comparten características similares, como ya hemos visto. Existen varias modalidades, pastas, de chocolate, maría Bio… las encontraremos en cualquier gran superficie fácilmente. Mercadona también dispone de sus propias galletas sin lactosa marca Hacendado. Si tienes un Mercadona cerca podrás conseguirlas cómodamente.

Combinando estas galletas junto con un vaso de leche sin lactosa nos aseguramos de no tener desagradables sorpresas durante el día. Combínalas con más cosas como un buen zumo de naranja o unas tostadas con mermelada y ya estarás listo para afrontar el día con energía.